viaje de 30 años

tomo las llaves, cierro la puerta, las luces quedan encendidas, salgo al pasillo, no me agrada el elevador, tomo las escaleras, repaso los peldaños y hay varias personas sentadas en ellos, llego al tercer piso, varios amigos de la universidad con los que he perdido comunicación, nos miramos tímidamente, cruzamos un par de palabras, de nuevo somos desconocidos, al fondo en una silla esta sentada ella, parece que espera mientras ojea una revista, me acerco y en esta oportunidad soy yo el que la besa muy apisonadamente, me regala una sonrisa, no hay palabras; vuelvo a las escaleras, repaso los peldaños y hay varias personas sentadas en ellos, llego al segundo piso, veo a algunos familiares míos que hacia años no veía, nos miramos tímidamente, cruzamos un par de palabras, de nuevo somos desconocidos, al fondo esta una niña sentada que juega con sus piernas, me mira muy tiernamente y me regala una sonrisa, me acerco y le doy un tierno beso en la frente, ella me llama por un calificativo muy especial, ahora yo no tengo palabras; vuelvo a las escaleras, repaso los peldaños y hay varias personas sentadas en ellos, llego al primer piso, varias personas que me observan, no conozco a nadie, ahora yo los desconozco a todos, cruzamos algunas palabras, no se quienes son, al fondo están ellas tres sentadas en una silla, me miran muy tiernamente, ahora ellas son las que se acercan me abrazan y me besan muy tiernamente, son mi familia… vuelvo a las escaleras, repaso los peldaños y hay varias personas sentadas en ellos, no conozco a nadie, decido no ir al sótano. Me miro en el reflejo de un vidrio, soy yo con casi 30 años encima, mis ojos conservan ese espíritu de antes, mi cuerpo refleja el paso de los años y de muchas tristezas y alegrías, ahora veo a lo lejos la salida, pero decido volver rápidamente a ese cuarto piso y lo hago, por el camino veo a las mismas personas de modo diferente, conservo el mismo sentimiento hacia ellas, llego a la oficina, tomo las llaves, abro la puerta, apago las luces y decido volver a bajar en mi vida, pero viviendo muy a mi modo.

Lo único que espero es que ellas sigan allí…